検索キーワード： "mario mario" ロマンチック

No había marcha atrás… Lo hecho, hecho estaba y aunque Aquiles no sabía hasta donde llegaría ni que sucedería, definitivamente, su mundo acababa de cambiar. Su curiosidad, las dobles intenciones, las indirectas y las frases con doble sentido, habían quedado atrás. Ese beso, había puesto patas para arriba a su estructura de hombre hetero. La armadura que Aquiles se había puesto para preservarse y para protegerse de algo que siquiera el conocía, finalmente, oxidada y maltrecha, había caído.

Puedes odiar a una persona luego de haberla amado incondicionalmente? La respuesta es sí. Azul Atwood fue mi amiga desde que éramos unos niños. Compartimos tardes calurosas bajo el sol de Texas, cabalgatas en el atardecer y risas imparables durante años. Pero, en un día ebrio, todo cambió entre nosotros y mi amor por ella se convirtió en un huracán que arrasó con todo a su paso.

Nadie dijo que fuera una buena persona, ni pretendo serlo. Podría achacarlo a mi mal carácter, mi profesión o mi falta de infancia, pero sería una necia. Soy quien soy y hago lo que hago porque me gusta, porque soy la mejor y porque necesito la adrenalina que me genera hacer rugir un coche bajo mis pies, un hombre entre mis muslos y aceptar encargos por los que me pagan cantidades indecentes de dinero. ¿Materialista? Puede, pero ya viví suficientes miserias como para saber que el dinero es lo único que me mueve.

Cuenta la leyenda, que las almas humanas están conectadas por un hilo rojo, que los dioses atan al dedo meñique, provocando que estén predestinadas a encontrarse, sin importar el tiempo, lugar o circunstancias. Aunque el hilo se enrede, se lie o se tense hasta casi romperse. Eso jamás ocurrirá, porque es indestructible. Hikaru es el heredero de una de las principales yakuzas de Japón y siente que su hilo se ha roto, pues su amada lleva cuatro años casada con otro, mientras que él fue obligado a casarse con una cría, durante la celebración de su compromiso con Ilke, su prometida.

Renée hat es satt, in ihrer eigenen Firma bevormundet zu werden. Als Tochter von Racing-Legende Ricky Duvrai muss sie sich täglich in einer Männer-dominierten Branche behaupten. Das Letzte, was sie braucht, ist ein Fake-Ehemann, schon gar nicht den gefährlich heißen Jax Rayne – egal, wie sehr er sie um den Verstand bringt. Mechatroniker Jax lebt für Motoren und unlösbare Herausforderungen. Die Faszination für Renée beginnt mit beidem. Und könnte viel zu schnell enden, als er hinter ihr Geheimnis kommt, das sie besser beschützt als er sein eigenes.

Eine Unterschrift für den Chef – das ist alles, was Bildhauerin Evelyn braucht, um endlich ihre Tonskulpturen in Chicago ausstellen und den Job als Anwaltsassistentin aufgeben zu können. Dumm nur, dass sich der Unterschriftenverweigerer als höllisch heißer Mistkerl herausstellt, der in der Wildnis von Kentucky seine ganz eigenen Ziele verfolgt.   Clay hat größere Probleme als die durchgestylte Citybraut, die plötzlich vor seiner Werkstatt auftaucht, auch wenn ihre Schlagfertigkeit ihn von den Füßen reißt – wortwörtlich.

Niemand braucht ihn. Genau das wird Gregor immer öfter bewusst. Als er seine Schwester Nina in Boston besucht, stößt er mit Julie zusammen, die ihm nicht mehr aus dem Kopf geht. Doch mehr als ihren Vornamen kennt er nicht. Er begibt sich auf die Suche nach ihr und findet sie. Aber nicht alles wird so einfach, wie er es sich ausgemalt hatte. Wird er Julie für sich gewinnen können, oder verliert er abermals eine Frau an einen Anderen? Dieses Buch ist der nächste Teil einer Serie, dabei aber in sich abgeschlossen. Jeder Teil handelt von einer anderen Person dieser Gruppe.